¿Cuáles son las amenazas e impactos de los humedales de Los Ríos?

Fotografía de la Corporación Humedales de Angachilla

Expansión urbana, plantaciones forestales y actividades agrícolas son algunos de los diversos impactos antrópicos que el Diagnóstico Integral de los humedales de la región de Los Ríos ha identificado y vinculado a los distintos tipos de humedales de la región. Así, once amenazas han sido asociadas a los humedales según sus características ambientales y cercanía o distancia de los centros urbanos y/o productivos.

“Es posible hacer una primera división entre humedales rurales y urbanos, y desde allí comprender las amenazas que estos sufren”, indica Montserrat Lara Sutulov del equipo ambiental del Diagnóstico,  “las presiones del desarrollo inmobiliario, por ejemplo, son propias de la expansión de las ciudades y suponen las amenazas de mayor impacto para los humedales urbanos, no así los rurales, que se ven mayormente afectados por las actividades productivas y de drenaje con el fin de evitar las inundaciones de sus terrenos”.

Ilustración de Vanessa Brown

Usando la clasificación de Cowardin (1979) empleada por este estudio, los seis tipos de humedales identificados en Los Ríos —estuarinos, marinos, lacustres permanentes, palustres emergentes, palustres boscosos y ribereños— están afectados por al menos dos de las once amenazas registradas, siendo la más transversal la disposición de basura y residuos sólidos.

Asimismo, los humedales palustres emergentes y palustres boscosos cuentan con el mayor número de amenazas, con al menos siete de las once indicadas: expansión urbana, plantaciones forestales y actividades agrícolas y ganaderas, disposición de basura, animales domésticos (mascotas), especies exóticas invasoras, relleno, drenaje e infraestructura vial.

No obstante, el resto de los humedales tiene condiciones particulares que explican la presencia o ausencia de ciertas amenazas por sobre otras, como es el caso de los humedales estuarinos y ribereños donde la contaminación por aguas servidas, contaminación por residuos industriales y el turismo no regulado son elementos en común. Además de eso, los humedales ribereños, a diferencia de los humedales estuarinos, están afectados por la presencia de especies domésticas y exóticas invasoras como el visón.

Esto último no ocurre en los humedales marinos, por ejemplo, que se ven principalmente afectados por la contaminación por disposición de basura y el turismo no regulado. Finalmente, así como los humedales marinos, los humedales lacustres permanentes se verían afectados por la contaminación por disposición de basura, la presencia de especies exóticas invasoras y el turismo no regulado.

Proyecciones

“Podemos estimar que las amenazas e impactos en los humedales van en aumento”, finaliza Lara, “durante la pandemia evidenciamos ciertos impactos por sobre otros, como la expansión urbana y las parcelaciones, pero existen otros, como el turismo no regulado o la presencia de especies exóticas invasoras, que influyen cada vez más en la intervención de los humedales. Por esto mismo, hace falta mucho trabajo desde los servicios públicos, sector empresarial y ciudadanía para reducir estas amenazas y desarrollar nuestras actividades de manera que generen menores impactos”.